Publicado: Dom Oct 12, 2008 12:11Asunto: Re: EL VIAJE DEL SEÑOR MIYAGI: LA REVIEW
hansolo Escribió:
Anda, veo que tu también eres del club: "anti puto oso de los cojones. Fuera de Disney YAAA"
Así es... En algún que otro post he dejado claros mis sentimientos hacia el oso ese Alguien dijo por aquí (creo que tú, pero no estoy seguro): "Si güini Disney, Hommer también"
hansolo Escribió:
¿4 días en Disney? ¿No son muchos?, aunque me parece que no fueron completos... cada vez más ganas de ir a japolandia, y es que "necesito" experiencias nuevas
Muchos?? La verdad que fueron tres y medio. Ten encuenta que cuando vayas, que tienes que ir, ya estará abierto el espectáculo de El Circo del Sol. Por lo tanto, el día de llegada para dar una vuelta por allí y al show, más otros cuatro, claro está.
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Publicado: Dom Oct 12, 2008 18:25Asunto: Re: EL VIAJE DEL SEÑOR MIYAGI: LA REVIEW
hansolo Escribió:
cada vez más ganas de ir a japolandia, y es que "necesito" experiencias nuevas
No creí vivir para leer esas palabras escritas con tu I.P.... el día que las digas en voz alta, por favor.... dime antes que me siente
Por cierto muy chula la review siembre es bien recibido que la gente gaste su tiempo en compartir sus vivencias con los demás, sobretodo con viajes tan poco vistos.
Publicado: Dom Oct 12, 2008 22:05Asunto: Re: EL VIAJE DEL SEÑOR MIYAGI: LA REVIEW
Pedazo de viaje, pedazo de fotos, pedazo de review
y a mi tampoco me iba la idea de Japon, asi que un dia tendré que ir para comprovar en vivo todo eso
saludos _________________ Intentando controlar la ansiaaaa!!!!
Es que soy muy adizo, muy frikiiii!!!
Publicado: Jue Oct 16, 2008 08:10Asunto: Re: EL VIAJE DEL SEÑOR MIYAGI: LA REVIEW
18 JULIO – TOKYO DISNEYSEA
Disneysea y Disneyland. Aunque en un principio la idea era hacer una visita fugaz a primera hora, estuve otro rato por la tarde.
Disneysea abría a las 10:00, una hora después que Disneyland. Así que tras un desayuno copioso me fui a los parques como siempre temprano. Durante la hora que iba a estar hasta marcharme a Disneysea tenía dos objetivos: el primero, intentar “vestir” la estatua de Mickey situada detrás del Castillo y después “exprimir” Space Mountain (y foto con algún personaje como Panchito, de Los Tres Caballeros). Dicho y hecho. Como era pronto yo pensaba que, en la zona trasera del Castillo no habría nadie. Error. Dos CM y eso que allí no había nada. Supongo que estarían esperando, como luego confirmé, a alguien. El caso es que les pedí permiso para vestir a Mickey y nada, que no tragaron. Que si Mickey es universal, que si tal, que si cual… Y como no era plan de estar haciendo el bobo me fui a SM. Me fui, pero con la idea de volver. Sobre SM no me canso de decirlo: ole, ole y ole. ¡A ver si aprenden algunos!
Cuando lo estimé oportuno, marché hacia Disneysea con la única esperanza que el musical Under the sea estuviese operativo. Lo primero que hice en la entrada fue fijarme en los paneles informativos y… Y al encuentro de esas bellas melodías que entonan las bandas con tanta maestría. Hoy era viernes. A pesar de que la afluencia en los parques era aceptable para trabajar sin agobios, me di cuenta que en las tiendas estaban colocando merchandising que no había visto en los tres días anteriores. Incluso el formato de las fotos On Ride era distinto. Eran las 10:30 y el Chip’n Dale’s Cool Service estaba empezando a hacer de las suyas.
Como a primera hora ToT sabía que iba a estar hasta arriba, el objetivo estaba claro. Mermaid Lagoon, concretamente Under the sea. ¡Qué pasote! Todo el mundo sentado en un anfiteatro redondo, primeros acordes, Ariel, Sebastián, Flounder, y como es bajo el mar los personajes flotan. Es decir, la representación tiene lugar por encima de tus cabezas, como si estuviesen nadando. Qué digo como si estuviesen, ¡Estaban nadando! Otro 10 y creo que ya he perdido la cuenta de cuántos van. Muy cerca, te puedes hacer una foto con la Sirenita y, a falta de Bella, buena es Ariel.
El recorrido de hoy era para ir atando cosas que quedaron sueltas el primer día, amén de machacar otras (sobre todo ToT, por intentar descubrir el “efecto” de la desaparición de Shiriki Utundu). Raging Spirits había que probarla. Era la coaster que tiene el 360º, pero repito, muy suave. Cuando me senté en el carro y me coloqué el arnés me dio un poco de miedo porque las protecciones laterales para la cabeza eran grandes, mullidas; pero no, ni un movimiento brusco. Esas protecciones deberían estar en una que yo sé… Y a Indiana. Y otra vez con esa sonrisa de oreja a oreja que tienes al bajar de muchas atracciones y que todos sabemos lo que significa. Rumbo a ToT, no tuve otra que pasar por Viaje al centro de la Tierra. Sin comentarios.
Era la hora de empezar con la operación ToT e intentar descubrir el efecto. No sería a la primera, claro está, ni a la segunda, ni a la tercera, ya que las primeras veces de hoy fueron para disfrutar de los detalles que brinda este hotel. Conocida la historia de Sr. Hightower (no le podían haber llamado de otra forma…), comentamos la atracción: Tras pasar por la recepción del hotel y ver el ascensor “donde todo ocurrió”, llegas a la sala de espera, el estudio de HH que ya lo quisiera yo para mi. Allí, cómo no, hay una estatua de Shiriki Utundu entre otros enseres del explorador. El CM pone un gramófono donde (se supone porque está todo en japonés) explican la desaparición de HH y en un momento determinado empiezan a suceder cosas extrañas, a Shiriki Utundu se le iluminan los ojos… ¡Y desaparece! Y aquí es donde empiezan las elucubraciones de cómo puede desaparecer sin hacer ni un ruido. Genial. A continuación se accede al ascensor. Si no recuerdo mal hay dos plantas tematizadas con colecciones de HH, y cada sala de espera para montar en el ascensor también tiene una tematización distinta (recuerdo una de las Cruzadas que me encantó). Lo demás ya lo sabéis…
El tiempo apremiaba y todavía estaba pendiente Big Band Beat, donde a ritmo de una gran banda se podía disfrutar de clásicos del jazz. Nada de temas Disney. Destacable, entre bailarines y cantantes, un solo de batería de Mickey. Quedaba poco tiempo para LDM y tenía que buscar un sitio para comer que reuniese dos condiciones: una, que no estuviera lejos de Porto Paradiso; otra, que sirvieran cerveza, que no todos tenían y me apetecía una. Así que la mejor opción era el Café Portofino, aunque no tuviese comida japonesa. Mientras comía, la música de Chip y Chop y su barquito retumbaba en el restaurante. Nada más terminar, y con la duda de si harían el show porque amenazaba lluvia, me coloqué en un sitio distinto para ver La Leyenda de Mythica.
Nada más terminar me marché a saldar unas cuentas pendientes al parque vecino. Pero claro, ya iba con la lección aprendida. A veces es mejor hacerse el tonto y sorprender, a preguntar y que te sorprendan. La verdad que era una tontería, pero… Llegué, vi y vestí. Sin preguntar, con decisión (o por lo menos aparente), saque las camisetas y tres fotos. Sólo voy a poner una, más que nada para no herir sensibilidades, quiero decir, por que Mickey es universal pero en este caso, era español:
Lo dicho, una tontería pero me quedé tan contento. Y era hora de ir despidiéndose de Tokyo Disneyland. Si hay que hacer una valoración de este parque, la nota es alta, muy alta. Exceptuando el tema camisetas (que hay poca variedad y las tallas van muy justas para algunos) todo lo demás para quitarse el sombrero, sobre todo por los pequeños detalles que es, a mi modesto entender, lo que diferencia un parque grande de un gran parque.
Alguna foto más, algún regalo y a rematar en Disneysea.
Aún quedaba por disfrutar otra vez de EL ESPECTÁCULO, BraviSEAmo. Hasta su hora estuve perdido por EL PARQUE (sí, con mayúsculas), paseando, disfrutando de los muchos rincones escondidos, aprovechando cada segundo que quedaba que, por desgracia, no eran muchos.
Hubo una de las zonas, Port Discovery, el puerto futurista del parque, que la tuve totalmente abandonada. Tiene dos atracciones: Stormrider, un simulador de una tormenta donde puedes experimentar sus turbulencias, y Aquatopia, como autopia pero en el agua. Siempre hay que dejar algo pendiente para volver…
La noche iba cayendo y la iluminación de EL PARQUE le cambiaba por momentos. ToT era sencillamente genial. Habían cambiado hasta el formato de la foto On Ride (observar el lado “ultra” de la foto).
De nuevo las 20:20, otra vez BraviSEAmo. Sobran las palabras.
Ahora sí. Había llegado la hora de marchar. Siempre el último día en un parque Disney, sobre todo para los “tontorrones” como yo es especial. Y éste sólo es comparable al último día de mi primera vez en Orlando. ¡Pedazo de parque! Como dije al principio, el mejor parque Disney con diferencia y de los que conozco, EL PARQUE. Supongo que volveré, pero sólo lo supongo…
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Publicado: Jue Oct 16, 2008 19:33Asunto: Re: EL VIAJE DEL SEÑOR MIYAGI: LA REVIEW
Buni... tú a mi no me esperes; si tienes que ir ya sabes... google, paciencia y horas
Desde luego quiero ir, de hecho, llevo queriendo ir desde que conozco de la existencia del Disney Sea, que realmente es quien puede tener la culpa en un 90% de que en algún futuro haga un viaje a japolandia....
Para "autoconvencerme" siempre digo a quien pregunta, que no voy, que nunca iré, pero "circe" bien sabe, que llevo diciéndole de ir desde que se inauguró Disney Sea, y "amaroto" fue unas semanas antes de su apertura (es él... ya se sabe )
He visto "cienes y cienes" de imagenes y videos del parque, y no me canso. Encima después de leer las impresiones de primera mano y las fotos de magic32, pues más ganas todavía.
Aún así, y como dice "la que me manda": "yo por un parque no voy".... y se acabó de hablar. Yo insisto en que hay más que eso, pero ella: por eso te digo que no me esperes si quieres irte tú.... que lo más seguro es que si voy algún día, puede que viaje solo, con la parienta en casa (lease casa, como: "donde a ella le de la gana" )
Mira, a lo mejor quedo con edmenahi y nos vamos "a comprar tabaco" un día de éstos
PD: Curioso el sistema de cinturón en ToT una pena, porque así no puede hacerse el truco del citurón bajo las piernas
Publicado: Dom Oct 19, 2008 18:08Asunto: Re: EL VIAJE DEL SEÑOR MIYAGI: LA REVIEW
19 JULIO – OSAKA
Hoy tocaba desayunar en el restaurante bueno. Me explico: El día que hicimos el check-in daban unos tickets los cuales te indicaban los restaurantes en los que podías desayunar y el último día tenías la opción de hacerlo en “Carnival”, el más lujoso de todos.
Aunque el tren hacia Osaka salía a las 12:00 desde Tokyo, todo estaba preparado mucho antes. ¡Y menos mal! Porque al ir a guardar unas monedas en la cartera me di cuenta que no la tenía. En absoluto se me pasó por la cabeza que me la hubiesen quitado: o bien estaba en la tienda Disney donde hice las últimas compras (o eso creía) o en la habitación. En seguida me puse en contacto con el personal del hotel, ya que había hecho el check-out, y con gran amabilidad y mayor celeridad subimos a la habitación y allí estaba. ¡Ufff!... Pero resulta que junto a la cartera estaba una llave de las consignas del parque que olvidé llevar. ¿The key?, comentó mi “acompañante”. Yo le expliqué que en la taquilla no había nada, que solamente tenía la llave porque había alquilado una en previsión de comprar algo y no tener que cargar con ello y que como estaba vacía la había dejado en la habitación… No me entendía. Y no es que no entendiese la conversación, que nos entendíamos en inglés: lo que no entendía es que hubiese pagado por una consigna que no iba a utilizar. Su única preocupación era si estaba vacía. Al bajar, me pidió que se lo explicase a otro compañero que tenía toda la pinta de ser algún superior. Y tampoco entendía la situación. ¿Una consigna sin usar? ¿Vacía? Le expliqué en qué parte del parque estaba la consigna y con mucha educación llamó por teléfono, supongo que a seguridad, para comprobar que era de allí. Yo me quedé al lado hasta que colgó. No quiero ni imaginar esta misma situación en EEUU. Después de la llamada, mil disculpas, mil lo siento, ¡Cuándo no tenía nada por lo que disculparse!
Un último detalle: si se os ocurre alguna vez visitar Japón y os dais una vuelta por TDR, olvidad la opción de ir un fin de semana. Al salir rumbo a Tokyo, pude comprobar que los aparcamientos estaban a reventar, cosa que no había ocurrido ninguno de los días anteriores. No quiero ni imaginar la asistencia de gente y las esperas en las atracciones…
Quitando la despedida de José, fueron cuatro días fantásticos en Tokyo Disneyland. Pero esto sólo era la mitad del viaje. Era la hora de estrenar el Japan Rail y los Shinkansen, los trenes balas japoneses.
A la llegada a la estación de Shinosaka estaba esperando Mª José, mi anfitriona-casera. Conocer a Mª José fue una casualidad de las muchas que se dan en la vida. Comentando a una compañera de trabajo que me marchaba de vacaciones a Japón, me dijo que su cuñada vivía en Osaka y que, a lo mejor, podía alquilarnos un apartamento. Las comunicaciones con Osaka se iniciaron y el resultado fue un apartamento, tal y como nos había explicado: dos terrazas, cocina (¡Gracias por el té de jazmín, estaba delicioso!), baño, comedor, una habitación y otra en altura (más futones), sin aire acondicionado pero con ventiladores (por la noche corría mucho aíre). El precio: 8 días, 160 € c/u.; la situación, estupenda: A doce minutos andando de la estación de Shinosaka, a seis de Higashiyodogawa y a cinco de Awaji.
Tras las presentaciones de rigor, fuimos a solucionar a la oficina de turismo de la estación una duda que me surgió haciendo la guía del viaje. El tren que debía llevarnos a Parque España el día 21 sólo operaba los sábados y festivos según la página web de los horarios, y el 21 era lunes.¿? Enseguida respiré tranquilo ya que el día 21 es festivo en Osaka: era el Día del Agua. Con una preocupación menos, empezamos con la verdadera inmersión gastronómico-cultural gracias a Mª José. Mientras esperábamos a Hosto, su marido, para ir al apartamento (transportes incluidos, jejeje), comíamos en uno de los múltiples sitios que hay en esta estación. La comida hoy, Soba y Tonkatsu. La mayoría de los restaurantes japoneses tienen en la entrada un expositor con todos los platos del menú hechos en cera. Así que si no tenían carta o no hablaban inglés, bastaba con salir fuera y señalar. Fácil. Invité gustosamente y fuimos al encuentro de Hosto.
He de reconocer que al conocer a Hosto no sabía si hacer una reverencia, tal y como se saludan los japoneses, o darle la mano. Fue él quien me dio un cordial apretón de manos. Con la maletas en la van, nos acercamos al apartamento para dejar las maletas. Primera explicación: los zapatos, fuera, que es un apartamento japonés. Por regla general, en las casas japonesas tienes que descalzarte en la entrada. Tras explicarme lo básico, pusimos rumbo a su casa para recoger a Raúl, el peque de la casa, y dejar a Hosto, que tenía que ir a trabajar (más tarde iríamos a su trabajo…). Y desde aquí, a una zona típica de Osaka, a Namba, a la calle Dotonbori. Nada más montar en el metro, ya que perdíamos el tren y tuvimos que cogerlo a la carrera, me dio la sensación que el vagón era un tanto extraño: asientos rosas, agarraderos rosas… Nos habíamos “colado” en uno de los vagones habilitados sólo para mujeres en hora punta porque se inflan a meterlas mano. Aunque tienen un horario “sólo para mujeres”, nosotros nos cambiamos a otro vagón. La educación es importante, y más en otras culturas. Dotonbori es una calle llena de vida, con infinidad de tiendas, restaurantes, luces de neón, salas de panchiko... Un punto de encuentro en esta zona es el neón de Glico, una marca de caramelos y galletas. Para los amantes del cine decir que por estas calles se rodaron escenas de la película Black Rain.
Esta zona, Shinsaibashi, es donde se agrupan todas las tiendas de firmas poco asequibles, léase Gucci, Luis Vitton, D&G, Tiffany's y demás. Desde aquí fuimos buscar a Hosto a su trabajo. Y ahí estaba preparando una paella para unos japoneses. Nosotros tomamos dos cervezas y una ración de jamón, que invitó Hosto, aunque podíamos haber pedido la tortilla de patatas, el pulpo, el chipirón en su tinta... Efectivamente, Hosto tiene un restaurante de comida española: Casa Pepe. Calidad, eh? Pero eso fue un aperitivo. Para cenar fuimos a un garito cercano donde hacían Okonomiyaki, una tortilla a base de una pasta de col y a la que puedes añadir cualquier ingrediente. De-li-cio-sas!!! Y además baratas (a parte de que pagara Mª José).
No lo he comentado, pero tanto Mª José como Hosto hablan español, japonés e inglés, lo que era un verdadero lujo para mi. Después de cenar, a casa. El día de hoy había sido un día de transición, tranquilo, de esos que se necesitan de vez en cuando para darte un respiro. _________________ You unlock this door with the key
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Mensajes: 4035 Localidad: Somewhere in the Llobregat
Publicado: Lun Oct 20, 2008 17:51Asunto: Re: EL VIAJE DEL SEÑOR MIYAGI: LA REVIEW
¿Los trampas? Que es una camiseta de la Europcopa, no de la Champions líssss _________________ El ayer es historia, el futuro incierto. El hoy es un regalo, por eso le llaman presente. Fuerza y honor
Publicado: Lun Oct 20, 2008 21:41Asunto: Re: EL VIAJE DEL SEÑOR MIYAGI: LA REVIEW
edmenahi Escribió:
Salva... que le puso tres camisetas. La que ves en la foto y...
Bueno... Para que no haya dudas y todo claro
¿Trampas? _________________ You unlock this door with the key
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